La actriz pordía dar a luz antes de tiempo y la mantienen en observación.
Todo indica que el embarazo de Reese Witherspoon se complicó, ya que a pesar de que estaba previsto que daría a luz en septiembre próximo, la actriz ingresó por segunda vez en un día a un hospital de Los Ángeles, pues temen que el bebé llegue antes de tiempo.Los médicos tienen a Reese bajo observación, pues corre el riesgo de que el parto de su tercer hijo se le adelante, algo que tratan de evitar.
Witherspoon ingresó la madrugada del martes pasado a un hospital de Los Ángeles, al sentir fuertes molestias en su vientre, y aunque fue dada de alta, a las pocas horas tuvo que ser nuevamente internada y permanece bajo los cuidados de profesionales.
Un allegado a la estrella de 36 años asegura que ella y su esposo, Jim Toth "están un poco preocupados por tener el bebé tan pronto. Aunque está muy cerca de la fecha, por lo que confían que el bebé estará bien".
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